Wednesday, July 6, 2011

Porqué "Tributo a Caifanes/Jaguares" es el disco basura del año, y el producto más culturalmente significativo de nuestros tiempos.

En el año de 1984 Saúl Hernández, Alejandro Marcovich y Alfonse André formaron el ya legendario grupo Las Insólitas Imágenes de Aurora, al principio informalmente, para tocar en las fiestas de los amigos y aparecer en un corto del hermano de Alejandro. De alguna manera su sonido, influenciado por King Crimson, con sensibilidades muy alejadas del rock urbano del Tri y de Rockdrigo González, resonó con la escena de aquel entonces.
La fundamental diferencia de la escena de mediados de los ochenta y ahora es su completa inexistencia. El rock en México era Ricky Luis, Vitorino (150 kilos de rock), Laureano Brizuela de Argentina (quien apareció en Siempre en Domingo con Las Insólitas como su banda), en la escena no comercial Luzbel con Arturo Huízar, Banda Bostik, El Personal de Guadalajara, Kenny y los Eléctricos y muchas otras bandas perdidas en la noche de los tiempos. Sin medios de distribución más que los oficiales las bandas intercambiaban cintas y tocaban en el Chopo, en Rockotitlán, y otro puñado de lugares. Buscar opciones de música en aquel entonces significaba salir a la calle e ir activamente a buscar a aquellos que te pasaran los demos de las bandas, ir a las tocadas, leer acerca de ellos en fanzines Choperos o de plano tener la suerte de encontrarlos personalmente en alguna fiesta.

En 1987 se disolvió Las Insólitas Imágenes de Aurora, Saúl y Alejandro se asociaron con Sabo Romo para formar Caifanes, para ese entonces ya eran una banda de culto, no aparecían en el radio (excepto Rock 101) o la televisión y llenaban el Rockotitlán. Su sonido se refinó, algo hizo clic en una escena musical que necesitaba urgentemente revitalizarse. La gran idea vino de BMG Ariola con la creación del sello Rock en tu Idioma, que lanzó a bandas de México, España y Argentina, ellos fueron los responsables de la popularidad de la ola argentina con Soda Stereo, Los Enanitos Verdes, Miguel Mateos, Virus, La Torre, Ficción.. y que grupos como Alquimia, Bon y Los Enemigos del Silencio, Fobia, Café Tacuba... entraran a escena.

En resumen, BMG Ariola(ahora Sony Entertainment)una de las grandes disqueras, el establishment comercial, fue quien decidió revivir la música comercial. Fue un movimiento maestro el que les permitió darse cuenta que incluir a estos grupos permitiría que sus seguidores regresaran a las tiendas de discos que otrora los habían decepcionado.

Aún el nombre "Caifanes" se había vuelto ahora una contradicción, palabra de los pachuchos de California equivalente al término "Outsider", aquel que vive fuera de la sociedad. Cuando Las Insólitas se transforman en Caifanes es cuando son englobados adentro del círculo comercial.

Caifanes fue, desde sus inicios, un acto comercial, esto no quiere decir que no tengan calidad (hay que dejar de lado esa sensibilidad hipster para la cual el término "comercial" se traduce como "demoníaco"). Su primer disco contiene el sencillo "La Negra Tomasa", una canción de definidas influencias afrocaribeñas.

Esa negra linda me tiene loco que me come poquito a poco...

El gran éxito del grupo fue mezclar en el tejido del rock progresivo la gama de la música mexicana, el mariachi en La Célula que Explota, marimba veracruzana en Te Estoy Mirando, La balada cantinera en Quisiera ser alcohol, el corrido postapocalíptico en La Llorona, para crear un sonido único.

Jaguares, el proyecto de Saúl Hernández, no tendría tanto éxito, su sonido intentaría de nueva cuenta incorporar los descubrimientos musicales de Caifanes, pero regresa al mismo cansado rock que hacían todos los demás en el mejor de los casos, otras veces terminan con una sensiblería tribaloide new age.

Actualmente vivimos más de veinte años después de la escena que creó a Caifanes,ya se acabaron las épocas de ir a buscar demos al Chopo. Rockotitlán cerró hace muchos años, así como el LUCC y el Roxy en Guadalajara. La revolución de Rock en Tu Idioma se institucionalizó y cayó en la misma decadencia y autocomplacencia del pop ochentero. Como reacción a esto llegó la Revolución MySpace; si hay una banda en Bielorrusia interesante la descargas desde la comodidad de tu casa, si no te gusta la borras, si te gusta la buscas y la sigues, la facilidad de grabar tu demo desde tu computadora ha hecho que broten miles, decenas de miles, cientos de miles de bandas, ahora ya no ocupan espacio en estantes de tiendas de discos, visitas su página por recomendación, se acabó la época de soplarte lo que al radio se le pegara la gana poner. Es el reino del usuario activo, más bandas y más maneras de contacto significa que ya no viven en una torre de marfil alejados de los mortales, les mandas correo, les das me gusta en Facebook, los mencionas en twitter...

Vivimos en una época de maravillas.

Ahora entendiendo esto, en pleno año 2011 tenemos el siguiente lanzamiento oficial de EMI Music México:




Juan Son, vocalista de Porter, nacido en 1984 (el mismo año que se formaron Las Insólitas Imágenes de Aurora)usa una canción ajena, un pretexto más para sus trucos vocales carentes de legado o propuesta estética, le arrebata su origen y su contexto, hace lo que él sabe hacer sin hacerla suya y nos da lo mismo, pero completamente vacuo.

Éste es el gran mal de nuestros tiempos; la trampa de la nostalgia.

¿Qué es nostalgia? Una reminiscencia a un tiempo pasado que parece más sencillo, una referencia a una aparente era dorada. Pero nuestra memoria es frágil y fácil de manipular, recordamos lo que nos conviene. Ese pop estéril, cansado, aburrido del que Rock en tu Idioma nos quería liberar está de regreso en Universal Estéreo, ahora somos adultos quienes éramos niños en los ochentas y noventas. Regresar a la misma música, las mismas series, la misma cultura de entonces es un anhelo a regresar a una época más sencilla, un anhelo de dejar de lado nuestras responsabilidades de adulto, regresar el tiempo y reconstruir el cascarón, el paraíso de la irresponsabilidad.

Aún peor, a los dieciocho años colgarse de un pasado y un contexto histórico que no te corresponde, escuchas a toda la bola de treintones y cuarentones contar de cómo eran sus épocas del Chopo y de Rockotitlán y pretender que las entiendes.

Y en el peor de los casos, pretender que lo vas a reinventar y terminas haciendo un monstruo irreconocible.



Austin tv parece decir; le estoy haciendo un homenaje pero el homenajeado no vino, así que mírenme a mí. Esto es común en la escena, me cuelgo de algo reconocible para la generación anterior y les doy otra cosa, y me salgo con la mía porque le metí el riff allí enmedio para cumplir la tarea.

Y esta abominación:



Chetes quiere salirse con la suya y aparte de cambiarle la letra despojar a la canción de toda innovación musical y meter una cantidad innecesaria de artificios. Es una fruta de cera, con la apariencia de una manzana pero hecha de plástico e imposible de morder. Y Ventilader hace exactamente lo mismo con Miércoles de Ceniza.



Sorprendentemente Belanova no es lo peor de este tributo, Denise Guerrero canta comprendiendo de qué se trata la canción, el problema es la concepción misma de la música que tiene el grupo, es música pasteurizada, edulcorada, inofensiva, te doy la canción pero ahora es apta para el público que por lo regular escucha Belanova, gente que pide que el entretenimiento sea su segundo cerebro.



El verdadero pecado es Antes de que nos olviden interpretado por Los Ángeles Negros, cuya carrera es muy anterior a todo esto, grupo chileno de los sesentas. Pertenecen a una realidad muy distinta y se nota. Interpretada por ellos es una subversión, una canción más perdida en un repertorio de casi cincuenta años, insignificante, irrelevante.


El acto de hacer un cover de una canción es un acto de amor, amo tanto la canción que quiero hacerla mía, quiero comentarla, elaborarla, hacerla crecer, tener un diálogo de igual a igual con el creador original. A lo largo de los dos volúmenes de este tributo vemos lo contrario, hago lo que puedo con mi limitado talento con una canción que si bien no es la mejor canción del mundo me queda muy grande, o en el caso de las versiones de Bobby Pulido, Banda Limón, Los Ángeles Negros y las otras bandas con carreras más extensas y reconocibles cumplir el compromiso y pasar a otra cosa.

Esta compilación, en dos volúmenes, es el más claro ejemplo del estado de la industria discográfica en nuestros tiempos. asolada por el embate de los nuevos medios, incapaz de competir con un flujo cada vez más grande de nuevas propuestas y nuevas voces, se transforma en el adulto que quiere dejar de trabajar y regresar a jugar con carritos y que lo mantengan. Regresa a lo conocido, a buscar un pasado que no le pertenece, lo quiere morder pero no le cabe en la boca, mastica lo que puede, lo regurgita, se lo vuelve a tragar, lo vomita, lo esteriliza, reempaqueta y revende como si fuera suyo.

Abominables interpreta Detras de tí con vocecitas de robot.


He elegido este álbum como el disco más culturalmente significativo del 2011, ejemplifica perfectamente la necesidad de asesinar a los medios de distribución miopes y decadentes del pasado.

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